Estos días Ana Medina expone en la ciudad de Jaén su primera exposición fotográfica. Sirva esta entrada para presentar algunos de sus trabajos incluidos en la muestra fotográfica.
Ana presentaba esta exposición de
un modo acezante, una caperucita roja introduciéndose en el bosque, temerosa
que apareciera el lobo. Sus fotografías, o mejor dicho, llamémosle imágenes, poseen
un significado inefable, algo así como el color de su pelo, cometiendo una
infidencia. Pueden parecer un vórtice, una barahola, y sin embargo son apenas
un parpadeo, una visión efímera, una débil luz similar al destello intermitente
de las luciérnagas, el aleteo de una mariposa… todo ello envuelto de una
atmósfera poética.