(A propósito de la polémica surgida por la censura a una foto por parte de Olympus)
JUAN MARIA R0DRIGUEZ
La decisión de Olympus me parece,
efectivamente, inquisitorial y ridícula.
Pero, quizá porque yo mismo tenga
fotos con niños desnudos tomadas en cabañas etíopes idénticas, tengo muchas
dudas sobre estas fotos y alguna certeza sobre cómo se toman: pagando a unas
tribus que permanecen estancadas en el tiempo porque se han convertido en
"figurantes" (y muy exigentes con la pasta, eh) de las reatas de
fotógrafos que aparecemos por allí continuamente buscando un exotismo que,
visto desde fuera, frena su progreso.
Hemos visto fotos como esa, que
por cierto, no es gran cosa, infinidad de veces y yo creo, las que son como esa
al menos, ya no aportan nada.
Es un debate complejo y yo no
tengo una respuesta clara, pero solo señalo que estos desnudos, posadísimos, no
solo no son espontáneos, sino que son cobrados por unas tribus que esperan a
los turistas ya desde la carretera como si las cámaras fueran su medio de vida.
Nosotros, desde nuestra prepotencia eurocéntrica, los fotografiamos
justificando como "fotografía documental" algo que no estoy muy
seguro de que lo sea. Pero que resulta una bonita excusa para saltar por encima
de los derechos de protección a la infancia que no podemos saltarnos en Europa.
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